Vamos a hablar de ideas, así que pongamos banda sonora de ideas:
La mayor parte de mi trabajo (cuando tengo trabajo) es buscar ideas. Como es natural, me interesa mucho el proceso de búsqueda de ideas y su evaluación, porque me ayuda a que mi propia búsqueda sea más efectiva.
Esa es la primera de las razones de que esté enganchado a Ideas4all, una web que se dedica a recopilar ideas de la gente. ¿Para qué? Pues para llegar a un millón de ideas. Lo dice aquí en este vídeo que no hace falta que vean si no tienen tres minutos:
Es una versión sofisticada del Yo quiero tener un millón de amigos de Roberto Carlos y así más fuerte poder cantar, en efecto.
Como es natural, la web recoge de esta manera naïf un porrón de ideas (¿las usarán para el Mal?). Las hay razonables, como esta en la que se aboga por reutilizar el agua de la ducha para recargar el WC (próximamente en sus baños, pero sustituyendo ducha por lavabo) o las cerillas de doble fósforo, cuya utilidad desconozco pero que seguro que aparecerían en Ffffound si algún diseñador sueco las crease. Pero la mayor parte, como era de esperar, son ideas peregrinas o directamente ridículas, o tan ingenuas que lo más que consiguen es enternecerte.
Y esa es otra de las razones por las que me estoy volviendo adicto a la web. Cómo no voy a ser adicto si la idea más votada por los usuarios es una en la que recomiendan a Obama -recién elegido presidente- que para gobernar con más éxito y justicia "Mire a los costados" y descubra todo lo malo que hay en el mundo y se enfrente a ellos con solidaridad y amor. No dice que sea Zapatero el autor, sino un argentino, pero cómo fiarse de este buenismo. Claro que aquí se acusa al autor, entre otros, de crear más usuarios para votar sus propias ideas. El buenismo es limitado y de corto alcance.
Cómo no voy a ser adicto si un panameño propone usar los anuncios de la tele para "cambiar la mente de las personas" para que abracen la Fe en Dios (entre otras cosas).
O que los coches estén equipados con un sistema magnético capaz de repeler a los ladrones.
O este otro que propone leer los contratos antes de firmarlos.
O que la gente no se cuele en las filas.
Hay hasta un apartado de MalasIdeas (te lo juro por Arturo) en el que uno puede quejarse de que las empresas pueden robar las ideas sin dar nada a cambio.
Ya comprenderéis que es inagotable el tema, echad un vistazo vosotros que tampoco voy a haceros yo todo el trabajo sucio (Idea: que Palomares nos haga el trabajo sucio). Pero quiero destacar dos que me parecen geniales y muy necesarias.
La primera es una larga y muy medida exposición en la que se propone (¿se suplica?) Abolir el reggaeton por el bien social. Yo sólo necesito el título para votarla, pero el chico ofrece más razones. Muy interesantes los comentarios de la gente a la idea. Pero mucho.
Y la segunda es esta:
No sé si es metairónico o no, pero me parece que tiene más razón que un santo.
3 comentarios:
Me recuerda a una campaña reciente del Ayuntamiento de Barcelona en la que pedían donantes de ideas para no sé qué. La verdad es que no le hice demasiado caso.
Tus entradas siempre me parecen de lo más interesante para reflexionar, al tiempo que me divierto mucho.
Un besote
Al: en el fondo todos los concursos consisten en una donación de ideas
Laube: muchas gracias. Ya sabes los versos: el cerdo agridulce enseña, el cerdo agridulce entretiene, y yo te digo contento: hasta la semana que viene!
Publicar un comentario