Las gasolineras están llenas de cosas curiosas. En una de Jaén había un montón de latas de aceite oliva tras una mampara; lo cual no es raro, estrictamente hablando, sobre todo si estás en Jaén.
Más raro es que haya un cartel escrito a mano en japonés (digo yo que será japonés).
4 comentarios:
Joder Chiqui, que poca visión comercial. Está clarísimo que en esa gasolinera saben muy bien lo que es la globalización y tienen claro que en cualquier momento parará un autobús lleno de japoneses ávidos de romper el stock de Aceites Vallejo. Sin duda, un tío listo. De hecho, creo que ya está preparando su próximo éxito: una camiseta que pondrá Nueva York, Londres, Jaén, Tokio. Y se venderá como churros. Ya verás.
Traduzco: "Anunciado en El sabor del cerdo agridulce."
La realidad supera siempre a la ficción.
Tanto, que yo sigo vivito y lurkeando.
Alejandro, sería una bonita camiseta.
Al: jajaja
Hans: no lurkees, bloguea. O como se diga.
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