
Vale que si te enamoras de un número que casualmente tiene pinta de ser de Lotería podrías hacer algo más por él (por ejemplo: no churretear una pared sino pagar una página de periódico), pero eso no le resta valor al gesto loco de escribir una declaración de amor.
A veces me imagino al número caminando por la calle y descubriendo la pintada y enrojeciendo (los números son muy tímidos). Otras veces me imagino al que ha escrito la pintada cantándole al número una canción de Álex Ubago (soy así de siniestro). Y otras me imagino al número follando con la que ha escrito la pintada, que es Megan Fox (véase el paréntesis anterior).
Yo también quiero enamorarme así.