Hace ya varias semanas que no hablamos aquí de esa extraordinaria novela, puntal de la Literatura del siglo XXI, que se conoce con el nombre de Me llaman Fuco Lois. Un clásico instantáneo que ya están tardando en comprar, caramba.
A pesar de que hace ya un mes que la novela está en las tiendas, todavía no había ido a ver qué se sentía al ver tu nombre escrito en un libro, escondido entre los cientos de ejemplares de novelas de Paulo Coelho. En la Fnac estaba en una de las mesas de Narrativa española contemporánea (muy bien colocado, soy español y es narrativa). Le hice una foto, venciendo mi legendaria timidez y el miedo de que un guardia de seguridad me llamara la atención, porque soy aún más fetichista que vergonzoso:
A pesar de que hace ya un mes que la novela está en las tiendas, todavía no había ido a ver qué se sentía al ver tu nombre escrito en un libro, escondido entre los cientos de ejemplares de novelas de Paulo Coelho. En la Fnac estaba en una de las mesas de Narrativa española contemporánea (muy bien colocado, soy español y es narrativa). Le hice una foto, venciendo mi legendaria timidez y el miedo de que un guardia de seguridad me llamara la atención, porque soy aún más fetichista que vergonzoso:
No está mal, al lado de Fernando Quiñones y Suso de Toro. Os juro que estaba así, no lo puse yo.
Luego me di una vuelta por la Casa del Libro y ahí estaba en una estantería; no hice la foto porque no era muy lucida: sólo quedaba un ejemplar, estaba en un sitio muy bajo y habría tenido que montar un show para que saliera bien o medio reconocible. Y ya tenía la foto de la Fnac, claro. Una chica que estaba bastante bien (qué duro es el verano en Madrid) estaba mirando en la mesa de Narrativa española contemporánea, Novedades. Pensé que podía sacar mi libro de la estantería, dejarlo sutilmente junto a ella, indicarle como quien no quiere la cosa que lo cogiera y ya decirle que yo era el autor, convencerla de que lo comprase con la promesa de firmárselo y ya que estábamos pues tomarnos un café y vivir un tórrido romance. Pero como, ya digo, soy tímido y mi mujer estará leyendo esto, no hice nada. Nada de nada. Un libro menos vendido.
Luego me di una vuelta por la Casa del Libro y ahí estaba en una estantería; no hice la foto porque no era muy lucida: sólo quedaba un ejemplar, estaba en un sitio muy bajo y habría tenido que montar un show para que saliera bien o medio reconocible. Y ya tenía la foto de la Fnac, claro. Una chica que estaba bastante bien (qué duro es el verano en Madrid) estaba mirando en la mesa de Narrativa española contemporánea, Novedades. Pensé que podía sacar mi libro de la estantería, dejarlo sutilmente junto a ella, indicarle como quien no quiere la cosa que lo cogiera y ya decirle que yo era el autor, convencerla de que lo comprase con la promesa de firmárselo y ya que estábamos pues tomarnos un café y vivir un tórrido romance. Pero como, ya digo, soy tímido y mi mujer estará leyendo esto, no hice nada. Nada de nada. Un libro menos vendido.
Despues me pasé por El Corte Inglés, pero no por el bueno porque no encontré la novela. Conozco gente que lo ha comprado en algún centro de esos, pero no en el que yo visité. ¿Se lo pido al dependiente? No, de nuevo actúa la timidez.
Así que me fui a casa, tan contento. Ya veis si soy sencillo. Una foto y/o una tableta de chocolate y me pongo como unas castañuelas.
Apunte adicional: He abierto otro blog dedicado en exclusiva a Me llaman Fuco Lois (está aquí o en el enlace a vuestra derecha) para tener reunidos los artículos sobre la novela en un solo sitio y facilitar su búsqueda. Allí hablaremos de personajes, pondré las críticas, contaré chascarrillos y cosillas así. De momento sólo hay un refrito de artículos aparecidos en El sabor del cerdo agridulce, pero imagino que irá creciendo con el tiempo. Echadle un vistazo si os apetece.
Actualización: Luisru me avisa en los comentarios de que (una de esas casualidades que no parecen casualidades pero que lo son) ha salido una reseña de Me llaman Fuco Lois en el ABCD, el suplemento literario del ABC. Me ponen bastante bien, y eso que en la novela le doy alguna que otra galleta al periódico (galleta injusta, por lo que veo). Podéis leerla aquí o, próximamente, en el Blog de Fuco Lois.
Actualización: Luisru me avisa en los comentarios de que (una de esas casualidades que no parecen casualidades pero que lo son) ha salido una reseña de Me llaman Fuco Lois en el ABCD, el suplemento literario del ABC. Me ponen bastante bien, y eso que en la novela le doy alguna que otra galleta al periódico (galleta injusta, por lo que veo). Podéis leerla aquí o, próximamente, en el Blog de Fuco Lois.
6 comentarios:
Enhorabuena por la critica en el ABCD (supongo que la habrás visto), pensaré seriamente en hacerte rico, aunque a mí esto de los best-sellers no me va mucho. Espero contar contigo si decido iniciarme en el dificil mundo de la literatura.
Hombre, muchas gracias. La verdad es que no la había visto, pero me la han enviado ya. Ha sido ponerse a hablar del libro y salir la crítica. No estaba programado.
Léetelo, hombre, que no es un bestseller, sino una crítica paródica de los bestseller, que, eso sí, se disfraza de uno de ellos para resultar más eficaz. Tosca definición pero que me parece justa.
Sobre lo contar conmigo, naturalmente; pero yo soy un pobre y modesto autorcillo nada más.
Me refería a que, como no soy lector habitual de bestsellers, no sé si me perderé las claves del asunto. Y espero contar contigo como posible lector, como nada más, que con lo duro que es llegar a la cima,(lo que te habrá costao) como para llevar equipaje.
?Fuco Lois? ?Que es eso? no me suena, oiga...
P.D. Aunque seguramente lo has dicho por activa y por mas activa, ?donde podemos hacernos con "El Sabor..."?
Ja, ja, ja. Te he malinterpretado dos veces en cuatro líneas, Luisru, nuevo récord. No hace falta haber leído muchos bestsellers, no, porque no se cachondea de la escena tal concreta de el Código Da Vinci, sino del género en sí.
Tienes un lector asegurado (un lector borgiano, además; porque Borges decía que era un escritor regular pero un muy buen lector). De todas maneras date cuenta que estaba dispuesto a echar una mano, ¿eh? Si es que estoy entregado a los lectores de este blog.
Ricardito: queda expulsado del blog por un período de dos días. Por listo.
Bueno, bueno, parece que la cosa pinta muy bien ¿no? yo estoy leyendo tu libro pero aún no lo he terminado. Por ahora me gusta y me río, ¿qué más puedo querer?
Me alegro por la crítica, es una buena noticia ¿cuanto le has pagado? ;-P
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