Noticia de última hora: Italia ha ganado el Mundial de Fútbol, con la correspondiente alegría de los italianos, que ahora aprovechan cualquier oportunidad para decir que son los mejores del mundo –ya no en fútbol, sino en general.
Otro que se habrá alegrado es el protagonista de esta espectacular noticia que podéis leer aquí, bajo el título de Un locutor chino pierde los papeles con el gol de Totti. En resumen, parece ser que en el Australia-Italia del Mundial, un locutor chino dejó de lado la objetividad y aprovechó cualquier oportunidad para animar a Italia, ante la indignación de los espectadores. Entre otras perlas, gritó en varias ocasiones “larga vida a Italia”, “No le deis ninguna oportunidad a Australia” y otros comentarios del mismo tipo. Me ha hecho gracia la crítica de un internauta, que dice:
Toma objetividad. Y también es bonita la respuesta del locutor, estilo Rostro de Hormigón Armado, que dice que no es una máquina y no puede ser imparcial todo el rato:
Es curioso que exijamos objetividad en la narración de los eventos deportivos, y miremos con prevención a los que se dejan llevar por su fanatismo, y sin embargo nos parezca lo más normal del mundo que el resto de la información que vemos o leemos sí esté teñida de ideología. Porque hubo un tiempo en que los periódicos, las radios y la televisión se cuidaban de ofrecer una imagen de independencia, presumían de contar la verdad. Hoy, sin embargo, parece que cada periodista es un tifosi, y no nos extraña su exaltación, casi la buscamos. Creo que lo más grave que ha sucedido en la prensa española es que se ha hecho común la frase de que la objetividad no existe, que se admite ya como premisa sin ningún análisis ni resistencia. Hasta tal punto de que si quieres enterarte de lo que está pasando en el país te ves obligado a leer a los comentaristas italianos, luego a los australianos y a dividir por dos. Triste, triste.
Otro que se habrá alegrado es el protagonista de esta espectacular noticia que podéis leer aquí, bajo el título de Un locutor chino pierde los papeles con el gol de Totti. En resumen, parece ser que en el Australia-Italia del Mundial, un locutor chino dejó de lado la objetividad y aprovechó cualquier oportunidad para animar a Italia, ante la indignación de los espectadores. Entre otras perlas, gritó en varias ocasiones “larga vida a Italia”, “No le deis ninguna oportunidad a Australia” y otros comentarios del mismo tipo. Me ha hecho gracia la crítica de un internauta, que dice:
No debería exaltar el feo juego italiano y ridiculizar a la brava escuadra australiana
Toma objetividad. Y también es bonita la respuesta del locutor, estilo Rostro de Hormigón Armado, que dice que no es una máquina y no puede ser imparcial todo el rato:
Australia me recuerda a un pésimo equipo que eliminó a China en 1981 en la clasificación del Mundial.
Es curioso que exijamos objetividad en la narración de los eventos deportivos, y miremos con prevención a los que se dejan llevar por su fanatismo, y sin embargo nos parezca lo más normal del mundo que el resto de la información que vemos o leemos sí esté teñida de ideología. Porque hubo un tiempo en que los periódicos, las radios y la televisión se cuidaban de ofrecer una imagen de independencia, presumían de contar la verdad. Hoy, sin embargo, parece que cada periodista es un tifosi, y no nos extraña su exaltación, casi la buscamos. Creo que lo más grave que ha sucedido en la prensa española es que se ha hecho común la frase de que la objetividad no existe, que se admite ya como premisa sin ningún análisis ni resistencia. Hasta tal punto de que si quieres enterarte de lo que está pasando en el país te ves obligado a leer a los comentaristas italianos, luego a los australianos y a dividir por dos. Triste, triste.
6 comentarios:
Si, antes la verdad es que eran mas moderados, sosos, pero moderados. Pero claro, tambien el ejemplo que has puesto es de un periodista deportivo, que son un genero ya mas "especial" dentro de la profesion. No es que vaya a decir que hay un "antes y despues de Urdaci" pero casi.
De todas maneras, soy de los que piensa que no hay nadie como los de fuera para que te informen de lo que pasa "dentro", Antes solia leer "El Pais" a diario, incluso lo compraba antes que esperar a la noche a que llegase mi padre. A veces ojeaba el ABC cuando iba a visitar a mis abuelos. Luego, de ir a la biblioteca a estudiar, me ponia a leer los tres: el Pais, El Mundo y Diario 16. Ninguno me convencio del todo pero combinandolos...; es mas, conforme pasaba el tiempo, me ha parecido que sus partidismos iban a mas (Diario 16 lo cogi enc asi su ultima etapa, y estaba completamente parcializado de manera descarada).
Cuando era pequeño, mis abuelos nunca hablaban de la guerra, y la verdad es que nunca me entere mucho de porque empezo todo y porque acabo como acabo (y aun sigo sin saber mucho, clro). El caso es que veia peliculas de la epoca estilo "La vaquilla", "Viva la Banda", etc. que la verdad, no me explicaban mucho el meollo politico (de pequeño me molaba la politica, si). Muchos años despues, cayo en mis ojos la peli de Ken Loach "Tierra y Libertad" y me dije "Anda la leche!!. ?Esto de verdad paso en España?" Me empezaba a enterar de ciertas cosas. Luego en la escuela de Idiomas me obligaron a leer "Homenaje a Cataluña" (libro que retome al venirme a este lado del charco; mas que recomendable), de George Orwell. Todo parecia que encajaba con la realidad que veo dia a dia, con mi opinion sobre el ser humano y no con los cuentos sobre amiguetes, mujeres alocadas y golferias que cuando era pequeño veia. Tambien es cierto que tampoco le preste mucha atencion al tema, pero creo que es un buen ejemplo de que en ocasiones, solamente los que no tienen muchos intereses pueden o quieren contar las cosas de manera objetiva mas o menos.
Poco antes de dejar de leer los periodicos de papel, los pocos fragmentos de , si no objetividad, si al menos mesura en los comentarios, venian de "la Vanguardia", y no de ningun otro "grande", aunque supongo que en todas partes cuecen habas, pero al menos los modales los mantenian. Luego ya me pase a los clasicos "metro" y el otro que regalaban. Era divertido ver luego como los periodicos de pago perdian el culillo por intentar hundir a los gratuitos, jejeje.
Ay!, lo dicho, la manipulacion de la informacion y/u subjetividad informativa estan a la orden del dia desde hace mucho tiempo, pero estoy de acuerdo con que desde hace menos, los periodistas mas parecen tertulianos borrachuzos, vendidos por dos monedas de plata, autenticos verduleros, que personas inteligentes que intenten argumentar razonablemente el porque de sus opiniones y puntos de vista.
Ahora me paso por elas webs de "el Mundo" y "El Pais" y la verdad es que no me entero de nada y me da bastante asco el leer las noticias tal y como las presentan. El tufo del parcialismo es bastante alto. Si alguien me pudiera informar de algun sitio algo mas presentable para leer noticias españolas, se lo agradeceria.
Ricardito, yo te recomendaría El Jueves, es lo único imparcial que conozco. Se mete con todo el mundo por igual.
Elmundo.es es bastante menos tendencioso que su versión impresa. Pero con mucho. Aunque la cosa puede cambiar porque acaban de cargarse al director.
Lo de El País es una cosa que me apena bastante, pero se ha convertido al Mal. A ver si hay una vuelta atrás.
Creo que el periódico más imparcial que hay ahora es el ABC. Quién me iba a mí a decir hace unos años que acabaría escribiendo esta frase, pero así están las cosas. Que sigue siendo un periódico conservador, pero al menos no intenta hacer proselitismo a base de modificar la realidad. Bueno, casi nunca.
Rebeca, pues tienes toda la razon. Se me habia olvidado incluirlo. Lo malo es que no actualiza las noticias dia a dia, pero... Antes estaba bastante enganchadillo.
??El ABC??? Dios!!, pero que es esto?? ?El mundo al reves? El pais esta derrumbandose!!!! (Notese el doble juego de palabras)
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